No dudo que los gringos y su nacionalismo exacerbado amarán Captain America: The First Avenger. Tiene las características necesarias de un héroe nacional, acorde con el objetivo de la creación del cómic en 1941.
Como en la Segunda Guerra Mundial el Capitán representó la esperanza de la libertad frente al imperialismo nazi, la cinta de Joe Johnston devuelve a los fanáticos de las producciones de Marvel la fe sobre su proyecto más ambicioso: The Avengers.
En esta ocasión -a diferencia de Thor- la inclusión del tema de The Avengers tiene un significado más concreto, aunado a que la intervención de the S.H.I.E.L.D. es sólo al inicio y final de cinta, por lo que la historia del nacimiento del Capitán se siente como un despertar individual.
Para algunos faltará la acción de Iron Man, los más prudentes entenderán que la recreación de la época echó mano de otros elementos narrativos, que le brinda a la cinta ese aire de cine viejo.
Después de Robert Downey Jr. ningún actor nos parecerá tan carismático y, aunque Chris Evans lo hace bien, el sínico millonario Tony Stark ofrece mayores posibilidades incluso cómicas, mientras que Steve Rogers es un personaje atormentado.
La principal desventaja, quizá la única, de Captain America: The First Avenger es que el Capitán es un superhéroe que nos parece ajeno, ya que proviene de un nacionalismo bélico que a algunas culturas nos es indiferente.
Cinefilia: 8
IMDb: 7.8
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